miércoles, 29 de mayo de 2019

Historias


Ahora que navego
de nuevo por la senda  
del conocimiento,
compartiendo el saber
con otras mentes
abiertas al intercambio,
en este mar donde nací,
me invade nostalgia de tí,
como olas que bañan
mi alma soñadora,
removiendo la arena
de mi reloj vital.
Cuantas historias
se quedaron atrás...
Añoro las que compartimos,
las que me contabas,
las que te conté,
que ya son tuyas,
pero, sobre todas,
aquellas que quedaron
en el tintero, sin decir,
que se perdieron,
diluyéndose en el tiempo
que discurre inexorable,
y se desvanecen
como el humo sutil
de nuestra hoguera
que se apaga lentamente
y que intento, en vano,
mantener viva
en el recuerdo de nuestros días,
en los que nuestras mentes,
y nuestros cuerpos,
fueron uno, incluso
en la distancia física

Mediterráneo, mayo de 2019


Cada día


Echo de menos tus besos 
en los que mi alma
volaba en pos de la tuya,
cuando los sentimientos
se enroscaban hasta formar
una espiral multicolor
que se deshacía en el espacio
en mariposas que revoloteaban
una en pos de la otra
como nuestras almas,
y nuestros corazones enlazados,
como uno solo,
componiendo una canción, 
melodía de amor eterno,
alegre, vital, de esperanza
digna de un ruiseñor,
que contigo aletea
en mi mente cantarina,
cada día, cada hora,
cada instante de mi vida

Getafe, marzo de 2019